¿Por qué  en My Granny le damos tanta importancia a que los más pequeños borden?

El bordado es una técnica ancestral que consiste en decorar telas con hilos de colores, creando diseños únicos y expresivos. Esta práctica, presente en diversas culturas a lo largo de la historia, no solo embellece prendas y objetos, sino que también ofrece una serie de beneficios para quienes lo practican, especialmente para los niños.

Beneficios del bordado en la infancia:

Motricidad fina: El manejo de agujas e hilos requiere de precisión y coordinación, fortaleciendo la motricidad fina de las manos y dedos de los niños. Esta destreza les será útil en la escritura, el dibujo y otras actividades cotidianas.

Concentración y atención: El proceso de bordar exige atención al detalle y concentración en la tarea, lo que ayuda a los niños a mejorar su capacidad de enfocarse y evitar distracciones.

Paciencia y perseverancia: Bordar un proyecto puede llevar tiempo y dedicación. Aprender a ser pacientes y perseverantes para lograr un objetivo final es una valiosa lección que el bordado les enseña a los niños.

Creatividad e imaginación: El bordado permite a los niños expresar su creatividad e imaginación al elegir colores, diseños y patrones. Esta libertad creativa les ayuda a desarrollar su propio estilo y a explorar su potencial artístico.

Autoestima y confianza: Al completar un proyecto de bordado, los niños experimentan una gran satisfacción y un aumento en su autoestima. Sentirse orgullosos de su trabajo les ayuda a desarrollar confianza en sus habilidades.

Relajación y bienestar: El bordado puede ser una actividad calmada y meditativa que ayuda a los niños a reducir el estrés y la ansiedad. Se convierte en un espacio para la tranquilidad y el autocuidado.

Vinculación social: Bordar en compañía de amigos o familiares puede ser una actividad social que fortalece los vínculos y la comunicación. Compartir este hobby con otros crea un espacio de aprendizaje e intercambio de experiencias.

En definitiva, el bordado es una actividad enriquecedora para los niños que ofrece beneficios tanto en el desarrollo de sus habilidades motrices y cognitivas como en su bienestar emocional y social. A través del bordado, los niños aprenden a ser pacientes, perseverantes, creativos y confiados en sí mismos, mientras se divierten y crean hermosas obras de arte.